*La encontraron días después, con las manos blancas de pintar su nombre en la pared, y el tuyo junto a él borrado de pensar... Que nunca volverá, que nunca ha estado allí, que todas las promesas que hizo no eran de verdad.
Y al verte quizo gritar, y no pudo más que susurrar palabras sin razón, rompió su corazón lamentando pensar...
Que nunca volverá, que nunca ha estado allí, que todas las promesas que hizo no eran de verdad.
Y al verte quizo gritar, y no pudo más que susurrar palabras sin razón, rompió su corazón lamentando pensar...
Que nunca volverá, que nunca ha estado allí, que todas las promesas que hizo no eran de verdad.


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